Dando una vuelta por varios blog de ciencia en el idioma de Shakespeare, he encontrado un interesantísimo artículo, tanto por el contenido como por las espectaculares fotos que lo ilustran, y aunque en un principio había pensado en traducirlo directamente, al final he decidido aportar mi granito de arena al texto, ya que entre otras cosas parece que el autor confunde enfermedad con agente infeccioso, y tratando el artículo sobre bacterios, creo que era justo hablar de estos pequeños seres.
Las Bacterias son los patógenos que más enfermedades mortales causan en sus huéspedes humanos. Millones de personas mueren anualmente a casusa de estos pequeños seres vivos que se reproducen en nuestro organismo y aprovechan cualquier debilidad que encuentran para hacer daño. Aún así, definirlas como Bacterias Mortales puede ser un poco engañoso, ya que deben de darse muchos factores a la hora de que una bacteria de este tipo cause la muerte, incluso el simple tratamiento adecuado de la infección puede hacer que no pase de unas simples molestias.
Empecemos con el top.
7. Salmonella
La Salmonella puede ser mortal en sus dos formas, bien sea como Salmonella Entérica o como Salmonella Tifoidea. Esta última es responsable de la muerte de unas 216.000 personas al año en zonas endémicas. Se propaga a través de las heces y la orina. Es curioso que haya personas que son totalmente asintomáticas ante esta infección, de hecho, es famoso el caso de Mary Mallon, la primera portadora norteamericana que en 1907 fue responsable de la muerte por infección de Salmonella de 53 personas. Era cocinera, y viendo la forma en la que se propaga esta bacteria creo que su restaurante no era un sitio muy recomendable para ir.
6. Clostridium Tetani
La bacteria responsable del tétanos, tiene como peor enemigo la vacuna que existe contra ella. Realmente el tétanos es producido por una neurotoxina que segrega esta bacteria, la exotoxina, tambien conocida como tetanospamina. La infección por parte de esta bacteria ocurre cuando esporas de este Clostridium penetran en el organismo a través de heridas infectadas. Los síntomas más claros son los espasmos, de hecho se puede decir que una persona que muere de tétanos lo hace de cansancio, al no poder parar de producir esos espasmos. Incluso estos espasmos pueden romper huesos del propio individuo.
En ciudades modernas está casi controlada, pero alrededor de 58.000 bebés mueren en el mundo anualmente a casusa de esta bacteria.
5. Staphylococcus Aureus
Los estafilococos son un grupo de bacterias que está compuesto por al menos 40 subespecies. Usualmente se encuentran sobre nuestra propia piel en cantidades considerables, pero un sistema inmune normal puede combatirla continuamente, y si se produce la infección del organismo, los antibióticos son muy efectivos frente a estos seres.
En los últimos tiempos ha aparecido lo que se conoce como MRSA, que son las siglas de Multidrug Resistant Staphylococcus Aureus, es decir, es una cepa de esta bacteria que es resistente a los tratamientos con antibióticos, y sólo la Meticilina es efectiva. Aún así, ya se están haciendo resistentes a este antibiótico, pero afortunadamente un grupo de investigación italiano a descubierto un Bacteriófago que es muy efectivo ante esta bacteria.
Es responsable de la Fascitis Necrotizante, o tambien conocida como la enfermedad de la carne fresca, ya que literalmente se va comiendo nuestra carne, produciendo una gangrena y necrosis fulminante. Curiosamente esta resistencia la hemos provocado nosotros al «atacar» continuamente a esta bacteria con antibióticos, y ha desarrollado mecanismos para poder resistirlos. Y aunque parezca irónico (y ciertamente asqueroso), uno de los tratamientos actuales que se usa frente a esta necrosis es el uso de larvas que se comen literalmente toda la carne muerta, dejando solo la carne en buen estado. De todas maneras lo más habitual es que una infección de este tipo acabe con la amputación del miembro afectado.
4. Treponema Pallidum
Esta bacteria espiroqueta, lo cual signifiga que tiene formas alargadas de hasta 500 micras, es la responsable de la sífilis, que históricamente ha sido una de las enfermedades más letales debido a la dificultad de su tratamiento, ya que era muy difícil de diagnosticar. De hecho, a la sífilis se le conoce como «El Gran Imitador», ya que sus síntomas se parecen a tantas enfermedades que es difícil saber que realmente estamos luchando frente a Treponema Pallidum.
La sífilis tiene tres fases, y si aplicamos el tratamiento durante las dos primeras no hay problema. El verdadero problema lo tenemos cuando estamos ya en la tercera fase, en la cual la bacteria ha invadido el cerebro, y empieza a aparecer la paresia, que es la pérdida de movimientos voluntarios, entre los que se encuentran entre otros la respiración. No me refiero a la respiración habitual, ya que esa es involuntaria, y si no fuera así moriríamos todas las noches, o al menos la primera, pero si por ejemplo nos estamos asfixiando, la respiración en ese momento es voluntaria, y una paresis podría impedirla.
La sífilis también puede afectar al corazón, causando paros cardiácos y a las arterias, pudiendo provocar aneurismas, que dependiendo de la arteria afectada puede ser fulminante.
Aparte de estos efectos graves, puede tener otros efectos realmente desagradables a la vista, y como no es el fin de este artículo, no voy a ponerlo.
Por último recordar que esta Treponema Pallidum se transmite a través de fluidos corporales, siendo una de las más importantes enfermedades de transmisión sexual que existen.
3. Streptococcus Pneumoniae
Se le conoce también como Neumococo, y como su nombre indica es la responsable de muchas de las neumonías que se producen diariamente, pero además de eso, es también la responsable de la meningitis bacteriana. La meningitis no es más que la inflamación de las meninges, tres membranas que recubren el cerebro, a saber: Piamadre, Duramadre y Aracnoides. Pues bien, la inflamación de las meninges puede tener un origen vírico, bacteriano, o incluso una simple infección por alguna toxina.
Lo más curiosos es que un número apreciable de Straptococcus Pneumoniae está presente en nuestro organismos, tal y como pasaba con el Staphylococcus Aureus, y el sistema inmune puede controlarlos, pero cuando se produce algún tipo de inmunodepresión, esta bacteria se convierte en una de las más letales que existen.
2. Mycobacterium Tuberculosis
También conocida como Bacilo de Koch debido a que fue descubierta por Robert Koch, recibiendo el premio Nobel en 1905.
Tal y como podemos deducir por su nombre, es responsable de la mayoría de casos de Tuberculosis, sin duda una de las enfermedades con más «historia», y a la que podemos encontrar también con el nombre de Tisis. En cualquier caso, todas las tuberculosis están producidas por micobacterias de distinto tipo.
Como curiosidad se puede reseñar que en las espinas dorsales de momias del antiguo Egipto se han encontrado Mycobacterium Turberculosis, de manera que parece ser un compañero de viaje del ser humano desde hace mucho tiempo.
En 2007, la OMS estimó que existían mas de 13 millones de casos crónicos, más de 9 millones de casos nuevos ese año, y casi 2 millones de muertes relacionadas con esta enfermedad. Lo más curioso es que estos datos hacían referencia a paises desarrollados o en vías de desarrollo, así que habrá que imaginarse qué pasa en los paises del tercer mundo. De hecho, la OMS empezó un programa que va desde 2006 hasta 2015 para salvar 14 millones de vidas que pueden irse por culpa de esta bacteria, para la cual no existe vacuna, y que además tiene la «habilidad» de permanecer duránte un larguísimo periodo en estado latente en los pulmones, para activarse en el momento menos pensado.
1. Escherichia Coli
Esta bacteria es sin duda el organismo procariota más estudiado por el hombre, y cualquiera que haya hecho algunas prácticas de biología relacionada con microorganismos la ha manipulado sin ningún temor.
De hecho es una bacteria que está presente en el intestino de la mayoría de los mamíferos, includo el ser humano, y por tanto, también está muy presente en aguas fecales.
Su función «habitual» en el organismo es actuar como bacteria comensal, formándo parte de la famosa flora intestinal, pero aparte de su función «buena», puede ser responsable de gastroenteritis, infecciones intestinales, mastitis, septicemia, neumonía, cistitis, peritonitis o síndrome hemolítico-urémico. Vamos, que cuando se pone de malas puede ser una bacteria realmente malvada.
Este cambio se puede deber a la colonización del intestino por otra cepa distinta a la habitual, alimentos en mal estado, beber agua no potable, etc… Podemos decir que cada uno tiene su Escherichia coli y que no se la toquen. Cuando aparece una de estas cepas virulentas los efectos son catrastróficos, y por la gran presencia de esta bacteria en todo el mundo, es sin duda la más letal. Aunque suele ser muy efectivo el uso de antibióticos, ya están apareciendo cepas resistentes. En paises dónde no existe el tratamiento con antibióticos (que son muchísimos) esta bacteria es responsable de un grandísimo porcentaje de muertes.
En definitiva, estamos rodeados de millones de millones de bacterias, las cuales en condiciones normales no deben se suponer un problema, pero ya hemos visto que como se desnivele un poco esta balanza, este planeta pertenece a estos pequeños seres y no a nosotros.
Fuente del artículo: 7 Deadliest Bacteria on Earth Autor: Michelle Collet